Cajas de esperanza y malvaviscos en miniatura
Un banco fuera de lo normal crea un impacto incalculable
Como la mayoría de los adultos, Jeni Hanson está siempre activa. La mamá soltera tiene niños que cuidar, comidas que cocinar, horarios que organizar, finanzas que administrar y hacer compras semanales. Hablando de compras... como madre de dos niños que están creciendo, ella está habitualmente en la tienda de comestibles. "Me gusta mantenerme ocupada", sonrió. "Y mis niños... bueno, ¡sí que comen!"
Además, Jeni logra ser voluntaria semanal en un banco local lleno de... comida. "Me encanta estar aquí", sonrió. "Me da un propósito".
Desde estantes altísimos con panes, granos y frijoles, a cámaras frigoríficas con leche, queso y jugo, algunos podrían decir que este lugar, llamado Midwest Food Bank, se ve (y huele) como un mega supermercado.
Pero la comida aquí es donada. No existen cajeros ni pasillos de salida. En su lugar, encontrarás voluntarios. Muchos de ellos.
Cada semana dan su tiempo y talento para ayudar a personas necesitadas. Ordenan y distribuyen las donaciones. Se ríen y forman amistades.
"Me encanta organizar los embarques de alimentos que recibimos", sonrió Jeni. "Los semirremolques entregan los artículos y cada caja es un misterio. ¡Abrirlas es como desenvolver un regalo!"
Aunque estas cajas no vienen en papel bonito o lazos de lujo, son los artículos en el interior que hacen que los ojos se iluminen y se eleve el ánimo.
"Estos alimentos hacen más que prevenir el hambre. Permite que las personas sepan que todo va a ir bien", dijo Jeni. "Permite que sepan que otros se preocupan y están ahí para ayudar".
Algunas veces las cajas contienen arroz o uvas o lechuga. Algunas veces están llenas de medicamentos o zapatos. Y de vez en cuando... contienen algo un poco más dulce.
"Una vez, recibimos bolsas de malvaviscos en miniatura... como el tipo que encuentras en los cereales para niños", explicó Jeni. "Y aunque no podemos dar malvaviscos en miniatura a los necesitados, podemos combinarlos con otros artículos - como verduras, fruta y yogur para comidas más balanceadas. Estamos agradecidos por todo lo que recibimos".
Bill Curtis, un voluntario desde hace mucho tiempo de Midwest Food Bank, está de acuerdo. "Me sorprende cómo existen muchas personas que pasan hambre. Cuando trabajas aquí... sabes que estás marcando la diferencia. Incluso empezamos un banco de alimentos en Kenia para ayudar a las comunidades cerca y lejos."
Pero más allá de la comida y del compañerismo que se encuentra dentro de estas paredes, Jeni dice que encontrarás algo más también.
ESPERANZA.
La mayoría la siente desde el momento que entran por las puertas.
"Ves la esperanza en las caras de los niños y de las familias que vienen aquí por asistencia", explicó Jeni. "La ves irradiar de nuestros voluntarios - en su energía y entusiasmo".
La propia Jeni entiende el impacto de la esperanza y de una mano amiga. Ella pasó por momentos difíciles hace cinco años y medio necesitando tanto comida como refugio para su familia.
Con la ayuda de las organizaciones sin fines de lucro y organizaciones benéficas (muchas de las cuales reciben suministros de Midwest Food Bank), Jeni logró reconstruir su vida. Recuperó la independencia y comenzó un nuevo capítulo para ella y para sus hijos.
"Aquellos fueron tiempos muy difíciles", dijo suavemente. "Pero no nos dimos por vencidos. Sobrevivimos porque hubo ayuda y estoy muy agradecida".
Hoy, Jeni continúa devolviendo el favor en Midwest Food Bank porque sabe que con ayuda y esperanza... viene la redención. "Ahora que mis hijos son mayores, los traigo para que sean voluntarios y les encanta", sonrió. "Es nuestro turno para devolver el favor".
Y ,a través del apoyo de negocios como State Farm, Midwest Food Bank continuará alimentando a vecinos cerca y lejos:
Para Jeni, la esperanza llega de diferentes maneras. Algunas veces es una sonrisa. O una caja de malvaviscos en miniatura. O un par de zapatos nuevos. Pero no importa las muchas maneras en que se recibe... cuidado y amor son el resultado final.
Para hacer una donación o ser voluntario, llama a Midwest Food Bank al 309-663-5350, o visita su sitio web para encontrar una ubicación más cercana a ti.