La pérdida de una vida valiosa salvará a muchos
Una familia de la Costa Este con la misión de promover el manejo con cuidado para todos
20 de junio de 2005
Había mucho entusiasmo en casa de Lourdes Verea y el Dr. Jorge Verea. Su hija Rebeka acababa de graduarse de secundaria, así que la familia lo celebró con una pequeña reunión en su casa de New Jersey. Esa tarde Rebeka y su amigo tomaron un receso en la celebración. Al igual que en cualquier otra noche se fueron en el automóvil a recoger a un amigo. Poco se imaginarían los Verea que esta sería la última vez que verían a su hija viva.
El reloj dio las doce de la medianoche
Los Verea oyeron tocar a la puerta de entrada. Eran dos oficiales de la policía quienes les dieron la noticia devastadora que ningún padre desea oír. "El conductor pasaba por encima de la velocidad permitida por una zona de 35 millas por hora con Rebeka en su asiento del pasajero", dijo Lourdes. "Su automóvil se estrelló contra un tractor de remolque que estaba doblando. Se cortó el techo del automóvil, matando a Rebeka instantáneamente.
Un momento para recordar
Miles asistieron al velatorio de Rebeka. Ver a tanta gente que sentía afecto por su hija dio esperanza a la familia. Los Verea se dieron cuenta que la vida de Rebeka había causado un impacto en tantas personas, y supieron... deberían seguir compartiendo su historia.
Días después del servicio, la familia organizó la Rebeka Verea Foundation.
"Tenemos como objetivo educar a los adolescentes acerca del peligro de manejar imprudentemente," dijo Lourdes. "Nuestro lema es, Di sí a la vida".
12 años más tarde
Los Verea todavía rompen en llanto cuando hablan sobre Rebeka pero tienen la determinación de mantenerse positivos, celebrar su vida y estar agradecidos del sinfín de maneras en las cuales su hija tocó la vida de otros.
Cada primavera, con el apoyo de State Farm, la Rebeka Verea Foundation es anfitriona de dos simposios educativos en New Jersey - uno para educadores y uno para estudiantes. Los simposios presentan a narradores diversos tales como cirujanos de trauma, víctimas de accidentes automovilísticos y oficiales de la policía.
Cada narrador comparte su conocimiento y experiencia con casi 1,000 estudiantes y 500 educadores.
¿Su misión? Educar.
¿Su meta? Prevenir tragedias y promover la seguridad al manejar.
Aunque los temas son serios, la fundación también permite celebraciones alegres. El simposio, llevado a cabo en abril (mes del cumpleaños de Rebeka), es un tributo a su vida. Los estudiantes bailan, agitan luces fluorescentes y cantan Feliz Cumpleaños a Rebeka.
El trabajo continúa
Con el propósito de seguir creando conciencia en cuanto a manejar con cuidado se ha instalado un velocímetro permanente en el lugar del accidente. Una calle cerca de la secundaria local ha sido nombrada Rebeka Verea Way y la foto de Rebeka y el logotipo de la fundación aparece en una patrulla de la policía.Además, la gala anual de la fundación recauda dinero para apoyar al Project Graduation en secundarias a través dos condados. El evento, llevado a cabo en la noche de graduación, es una celebración libre de alcohol y de drogas.
"La fundación es parte integral de nuestro diario vivir", dice Lourdes. "Lamentablemente mi hija murió, pero estamos trabajando arduamente para prevenir que otros tengan que pasar por una experiencia similar. Siempre estamos celebrando la vida de mi hija. Creo que la fundación es a largo alcance y prevalecerá más allá de nuestras vidas".